El Club de Golf Castillo de Gorraiz colabora en la extinción de un incendio en las cercanías de Olloki

El drama ecológico, social y económico provocado por los numerosos incendios que asolan estos días muchos puntos de la geografía española, todos ellos de enorme valor ambiental, ha puesto de manifiesto la significativa contribución de los campos de golf en la lucha contra su extinción en aquellas zonas en las que el incendio se produce o avanza en sus proximidades.
En estos días tan complicados, en el marco de situaciones límite que exigen el apoyo de decenas y decenas de instituciones y personas involucradas en su extinción, se ha revelado la positiva aportación de los campos de golf, con mención especial para el incendio acaecido en las cercanías de Olloki, donde el Club de Golf Castillo de Gorraiz ofrecieron sus reservas de agua para su extinción.
No en vano, la colaboración de los campos de golf en la extinción de incendios es cada vez más habitual en los últimos años y, en muchas ocasiones, la única arma efectiva para que el efecto perverso de las llamas sea el menor posible.
Los helicópteros y aeronaves involucradas en la extinción del incendio llenaron en este caso repetidas veces sus dispositivos para recoger agua, con capacidad de aproximadamente mil doscientos litros en cada recarga, con objeto de arrojarlos sobre el incendio forestal próximo.
Los incendios forestales son una de las peores lacras ambientales que padecemos en España. Los efectos nocivos que representan (pérdida de vegetación, suelo fértil, biodiversidad en general, emisión de gases de efecto invernadero, etc.) suponen uno de los grandes problemas para el conjunto de la sociedad y para los técnicos de las distintas administraciones públicas de nuestro país involucradas en este importante asunto.
En este contexto, los campos de golf se convierten, una y otra vez, en un poderoso aliado en la lucha contra los incendios forestales, que en entornos próximos a urbanizaciones y pueblos sin capacidad de respuesta constituyen en muchos casos el recurso más eficaz para su extinción.